Enoturismo: la experiencia de visitar bodegas, y descubrir tu favorita

A todos nos gusta experimentar por una vez el proceso que conlleva la elaboración de un buen vino e incluso participar en él.  

¿Qué es el enoturismo? 

También conocido como turismo del vino o enológico es un viaje organizado a una zona vitivinícola para conocer en primera persona y desde su interior el mundo del vino: las bodegas, los viñedos, las barricas y las botellas, su elaboración e historia. 

El interés principal es el vino, no obstante puede ser complementado con una buena muestra de gastronomía local para hacer gala del maridaje regional, el turismo rural, la cultura local y los entornos naturales que acompañan las hectáreas de viñedos. 

¿Qué valor aporta el Enoturismo?

El turismo del vino aporta múltiples beneficios tanto a medio como a largo plazo:

• • El enoturismo impulsa la economía de la región: Regalos, hoteles, restaurantes, transportes, son algunas de las áreas que se benefician del turismo de vino.  

• • Forma parte de la tradición local: Antes que existiera el término enoturismo, a las bodegas les gustaba invitar a forasteros para que les ayudaran en las vendimias, permitiéndoles conocer así sus tradiciones y maneras de cultivar la vid. 

• • Conocer el proceso de primera mano, esto añade valor al mundo del vino, aporta cultura general y enaltece el elaborado proceso de producción.

• • Conoce a la bodega por dentro: cuando vas a conocer la bodega serás capaz de ver los rostros y las historias de los responsables que hay detrás de su elaboración. Esto se traduce en una experiencia inolvidable para el visitante y quien con gusto te recomendará a familiares y amigos.

¿Qué actividades puedo hacer en el enoturismo? 

Lo elemental para asegurar un buen tour de vinos es: 

• • Paseo por el viñedo: Puede ser a pie, en bici, con un todoterreno…, acompañado de una explicación detallada de la variedad de uva, las características del terroir y el método que se emplea para el cuidado de las cepas. 

• • Talleres y catas al aire libre: No es lo mismo una masterclass de vinos en un auditorio que en una bodega, estar rodeado de barricas, probar y ser partícipe de una evaluación o ver cómo se realiza el embotellado, o incluso en un picnic al aire libre disfrutando de un bonito atardecer rodeado de viñas centenarias.

• • Visita guiada por todas las áreas: Desde las barricas hasta donde se guardan las copas. Permitiéndonos conocer mas a fondo la historia del vino y su producción, siguiendo los pasos de las valiosas uvas en su recorrido hasta el producto final.

• • Un almuerzo conociendo la cultura de la zona: La mejor oportunidad de conocer los productos y la gastronomía local acompañados del mejor vino, maridando los productos de la zona con sus mejores caldos.

¿Cuándo hacer enoturismo?

Cualquier momento del año es bueno para hacer enoturismo. Las bodegas ofrecen experiencias en todas las épocas del año.  Para muchos la época más agradable del año es el final del verano, incluso las bodegas ofrecen experiencias diferentes en estas épocas del año, como son un picnic en el viñedo o una ruta en bici. La época de otoño entre agosto y septiembre es una época muy especial para las bodegas ya que es cuando realizan la vendimia y ofrecen actividades especiales relacionadas con ellas. Has de tener en cuenta que muchas bodegas dan prioridad a la elaboración del vino, y puede que cierren sus puertas al público durante esta etapa tan bonita y ajetreada para ellos. Al fin y al cabo, la base del enoturismo es el vino.

Visitar bodegas es una gran oportunidad para vivir una experiencia única: participar en el proceso de recolección de la uva, ver el fermentado o incluso participar en el pisado de la manera más tradicional posible.

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